reflexiones

La felicidad está en el futuro

Por @lic.julianabereny «Tengo que aguantar un poco más, porque lo que viene es mejor» «No hay mal que por bien no venga» «Para poder disfrutarlo me tiene que costar» «Si no es con sacrificio no es lo mismo» «Ahora estoy sufriendo pero en 2 años cuando lo consiga estaré mejor» Testimonios reales. Es una frase que en el último tiempo escuché mucho. Y yo creo que la felicidad no está en el futuro, o sí, tal vez, pero si solamente puedo anhelarla de cara al futuro ¿Qué le queda a mi presente? Me parece importante primero hacer una distinción entre lo que es felicidad y estado de bienestar. La felicidad son momentos, no es un constante, si hablamos de constancia estamos ante lo conocido como estado de bienestar. La felicidad está ligada a momentos de contraste, en donde pasamos de un momento a otro y en ese cambio por contraste nos sentimos felices. Seguramente has querido emprender algo, comenzar alguna actividad, y fuiste de los que pensó, lo haré cuando tenga dinero, cuando disponga de más tiempo, cuando mis hijxs crezcan, cuando tenga el panorama más claro, cuando, cuando, cuando.. y así seguimos posponiendo la vida. Te entiendo, es posible que nunca sintamos que es el momento ideal, pero ¿realmente crees que va a llegar un momento ideal? posiblemente no, siempre algo va a suceder. A veces también es más fácil dejar que la vida «nos lleve» desresponsabilizandonos de nuestra propia felicidad, porque ojo, sentirnos en paz con nosotrxs mismos es un esfuerzo, además de una decisión. Conocen la frase que dice: Vive cada día como si fuera el último, creo que es una frase extraordinaria, porque es muy cierta, creemos inconscientemente que somos eternos y posponemos nuestro deseo por excusas, miedos, incertidumbres, no nos permitimos intentarlo, incluso fallar si es necesario, porque fallar también es una opción dentro del proceso, y es maravilloso, porque significa que lo seguimos intentando. Te invito a pensar a ti que tanto te gusta vivir proyectando ¿Dónde te gustaría estar en 1 año? ¿Quién te gustaría ser? Ahora que ya tienes la respuesta, te cuento que para llegar hasta ahí, HOY, ahora mismo tienes que empezar a construirlo, esa versión de ti, no aparecerá dentro de un año mágicamente. Como siempre digo, el resultado es la consecuencia del proceso, si HOY no estás haciendo nada para trabajar en tu felicidad, tampoco lo vas a hacer dentro de un año, eso es así. Entonces te digo, a ti, si a ti, la vida es eso que está pasando ahora mientras estas leyendo esta nota, lo demás es fantasía. ¿Entonces no es bueno proyectar? ¡Claro que si, lo es! Pero una cosa es proyectar desde la construcción del presente y otra es malvivir desde un presente vacío anhelante de un futuro incierto. Te propongo algo, ¡Toma lápiz y papel! Haz una lista con las cosas que te gustarían hacer y no estás haciendo, con las cosas que disfrutar, pequeñas, no hace falta que seas muy pretenciosx, puede ser: el aroma del café, pintar, tomar fotos, leer, programar un viaje, mudarte, cambiar de trabajo, hacerte un peinado distinto, lo que quieras. ¿Cuáles de esas cosas SI puedes hacer ahora mismo? Y de las que no, por ejemplo viajar, quizá puedes ir armando un itinerario de lugares que te gustaría recorrer, ir mirando vídeos en donde te cuenten más del lugar. Haz al menos una de esas cosas de tu lista por día. Recuerda que tu vida también puede ser feliz en el presente, no todos los días no a cada minuto, porque estar triste también es necesario y parte de la vida, pero si puedes vivir eso que proyectas a futuro en tu presente.

La felicidad está en el futuro Leer más »

El detrás de escena del desarraigo: Mi experiencia personal

Nos podríamos imaginar que al elegir irnos a vivir a otro país, un país con el que siempre soñaste, que siempre te gustó, en donde apostas a una vida mejor, sería un escenario completamente de alegría, de felicidad y realización, incluso, cualquier persona a la que se lo contarás podría imaginar que eres  una afortunada y probablemente le gustaría estar en tu lugar. Ahora bien, ¿Es todo felicidad y alegría emigarar a otro país? La respuesta es no, claramente no, hay muchos factores en juego. Pasan infinidad de situaciones desde el momento en que reconoces tu deseo de emigrar, hasta que finalmente lo llevas a cabo. Desde antes de llegar a destino, estamos desarrollando un conjunto de emociones, pensamientos, sentimientos, inseguridades y sobre todo EXPECTATIVAS. Y hago hincapié en la palabra expectativas, porque aunque seamos personas realistas, siempre nuestra expectativa, al irnos a vivir a otro país, va a ser mayor que la realidad que efectivamente vamos a encontrar al llegar a destino. Si también has emigrado seguramente  pensaste que llegarías a tu nuevo lugar y se resolverían todos tus problemas, que los trabajos vendrían a ti, que conocerías a muchísima gente divertida  y rápidamente te harías muchos amigos, que no extrañarías tanto a tus afectos, ni a los rincones de tu ciudad, y probablemente te hayas dado cuenta que no fue tan así. Llegamos, llenos de ilusiones y entusiasmo y la realidad le pega un choque brutal a la fantasía, empiezas a vivir en una montaña rusa de emociones y de repente te ves inmerso en mil trabas burocráticas, trámites, papeles, de repente te conviertes en una especie de gestor de extranjería.  Sientes que ninguna calle es la tuya y no conoces ni a los famosos en televisión. Buscas una vida mejor, nuevas experiencias, desafíos,  tratando de conectar con el momento y no pensar tanto en los vínculos que dejaste en tu país, pero la verdad es que extrañas, un montón extrañas. En mi caso en particular, y seguramente en el de muchos de ustedes, además de todo lo que vengo mencionando se suma, que poco después de llegar a España comenzó la pandemia mundial del COVID-19, lo que acrecienta la necesidad de sentir hogar, de sentir estabilidad, contención. Todo lo que estabas construyendo se frenó y comienzas un loop entre días positivos, algunos más negativos y otros en donde simplemente no quieres pensar en nada. De todos modos, manteniendo el realismo con el que está escrita esta nota, tengo que decir, que así como comparto este aspecto del desarraigo, también expresarles que emigar por elección, es conectar con nuestro deseo, es ser asertivos, poniéndonos en un papel protagónico de nuestra vida, es ser valientes, es el fruto de nuestro esfuerzo y constancia durante mucho tiempo, es resiliencia, es salir de la zona de confort, es animarse, desafiarse,  es conocer otras culturas, otras personas, es aprendizaje, autoconocimiento, y todo lo que a nivel personal represente para cada uno de nosotros mismos.  Y si bien al principio es difícil, como todo cambio, es un desafío motivante y enriquecedor a nivel personal que sin duda y a pesar de todo, lo recomiendo y volvería a elegir. ¿Has tenido la experiencia de vivir en otro país? ¿Te sientes identificado? ¡Cuéntame tu experiencia! Para ver más contenido similar te invito a unirte a mis redes sociales:Instagram: http://instagram.com/lic.julianaberenyYoutube: http://youtube.com/licjulianaberenyFacebook: http://facebook.com/lic.julianabereny

El detrás de escena del desarraigo: Mi experiencia personal Leer más »